lunes, 5 de mayo de 2008

5 del 5, fácil de recordar

Y eso es bueno, porque mi memoria falla de a ratos, y especialmente proclibe a olvidar fechas y números y esas cosas.

Pero un cinco del cinco nació Lila, y por suerte es fácil de recordar.

Parece mentira tanto tiempo, ya tiene cuatro añitos... y es toda una personita. Parece mentira que hayan pasado cuatro años.

Feliz cumple mi amor.
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Varias veces entre las asperezas de estos últimos meses me he preguntado qué es el amor, buscando esa sensación en mi pasado.
¿Será que simplemente uno lo sabe, no puede realmente definirlo?
¿O será esta solo una estupidez mediática?

Algo de eso hay, seguro. Pero también es innegable que, de alguna forma, ciertas personas nos alteran los patrones mentales, nos cautivan la imaginación y los segundos, nos preocupan, nos exasperan, y solo queremos estar con ellas. Ellas. Siempre ellas, ¿verdad?

De vez en cuando vuelvo a ese ejercicio idiota de buscar el amor. Hace tiempo ya, incluso tenía códigos para reconocer a mi persona ideal... creo que incluso la "prueba" no la sabe nadie (¿vos la sabés? ¿te conté alguna vez?).
Después de todo, si el amor es solo una idea idiota, ¿de qué sirve buscarlo? ¿Para qué desearlo? ¿Por qué escribirle tantas canciones y rimas y prosas? ¿Vale la pena morir y matar en su nombre?

No sé, hoy estoy un tanto deprimido.

Me hice unas minis vacaciones en la casa de un amigo, lejos de todo lo que me preocupa... pero volviendo a la realidad de La Plata, en el micro, me preocupó en que no me haya preocupado mi ausencia.

Supongo que es masoquista, ¿no? Sentirse mal por haberse sentido bien es un poco estúpido pero debe ser simplemente mi forma actual.

Y algunas cosas se me aclararon, veremos que sale de todo esto.

1 comentario:

chica migraña dijo...
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